¿Cómo se hace la fertirrigación?

Tanque de mezcla de fertirrigación
Índice
El siguiente vídeo del Canal Emilia Romagna (Cer), que forma parte del proyecto Acqua.docet, aborda precisamente este tema. Se trata de un videotutorial con indicaciones claras, fórmulas para preparar la solución de caldo y consejos para sacarle el máximo partido.
Por último, una vez preparada la solución madre, los fertilizantes se mezclan con el agua de riego mediante la inyección directa de la solución madre en el sistema de riego.
La fertirrigación de concentración constante se utiliza cuando la fertirrigación por aspersión se lleva a cabo con máquinas autopropulsadas y la distribución se realiza a lo largo del riego, manteniendo una concentración constante de la solución nutritiva en la línea de distribución.
La técnica de la fertirrigación consiste en administrar los fertilizantes de forma fraccionada a través del sistema de riego Foto: Tomada del vídeo del Canal de Emilia Romagna
Kit de fertirrigación
localización precisa – con regímenes de riego localizados, el desarrollo del sistema radicular tiene lugar donde cae el agua de riego. La fertirrigación significa llevar los fertilizantes al lugar exacto donde serán absorbidos.
Volumen controlado: el control del volumen de riego se consigue fácilmente con sistemas de riego de bajo volumen (por ejemplo, por goteo). Los fertilizantes aplicados mediante estos sistemas se dosifican cuantitativamente de la misma manera.
Reducción del impacto medioambiental: una mayor eficiencia también implica una menor pérdida de fertilizantes, lo que a su vez supone una menor contaminación medioambiental de los acuíferos por lixiviación, o de los ríos por escorrentía, etc.
La disolución de los abonos coloreados suele producir una solución coloreada. En el caso de los abonos coloreados recubiertos, una parte de los materiales de recubrimiento puede quedar sin disolver y formar una capa superficial que debe eliminarse antes de la inyección.
Dispensador de fertirrigación
– ubicación precisa, permite el desarrollo de un sistema de raíces precisamente donde caen el agua de riego y los nutrientes. En la práctica, la fertirrigación significa llevar los nutrientes al lugar exacto donde serán absorbidos por las raíces.
El mantenimiento de los tanques consiste en comprobar si se han depositado residuos, que deben aclararse al final de cada ciclo de fertirrigación. Aclare y limpie siempre completamente los depósitos cuando cambie de tipo de abono.
Cuando no se utilicen, los depósitos de plástico o fibra de vidrio deben mantenerse limpios y secos. Los depósitos metálicos deben dejarse llenos de agua limpia para evitar la oxidación y prevenir la corrosión. Las válvulas de los tanques deben ser revisadas para detectar fugas y mantenerse limpias. En caso de fugas o corrosión, hay que actuar con rapidez para evitar que se derrame el abono.
Los iones de hierro en su forma reducida aceleran el desarrollo de ciertos tipos de bacterias, lo que da lugar a la formación de mucílago bacteriano, que constituye una gran amenaza para los sistemas de riego de bajo volumen en general y los sistemas de goteo en particular.
Fertirrigación de bricolaje
Si, por el contrario, la floración de la primera etapa comienza a aparecer, hay que centrarse en una fertilización equilibrada de los macroelementos, con productos cuya relación nutricional esté en torno a 2.1.2 o 1.1.1.
Para las cosechas de menos de un mes, sigue siendo posible la fertirrigación con productos predominantemente potásicos (nitrato de potasio o sulfato de potasio); alternativamente, o de forma paralela, se puede prever la fertilización foliar con productos a base de algas o con productos de acción bioestimulante, que favorecen la coloración y el agrandamiento de los frutos.
En este periodo, para el manzano en particular, pero también para el peral, es de gran importancia la atención a la absorción del calcio por parte del fruto, que debe cuidarse con una fertilización específica, pero sobre todo evitando los desequilibrios nutricionales y los excesos vegetativos.