Tesis sobre la carbonara
“Cuando Roma fue liberada, la escasez de alimentos era extrema, y uno de los pocos recursos eran las raciones militares, distribuidas por las tropas aliadas; éstas incluían huevos (en polvo) y tocino (panceta ahumada), que algún genio desconocido habría tenido la idea de mezclar condimentando la pasta.”
Estimulado por una reciente visita a Arcangelo Dandini, uno de los modernos “profetas” de la carbonara en particular y del redescubrimiento y la reescritura de la tradición gastronómica romana en general, el comisario Rebaudengo decidió llevar a cabo una investigación adicional, aprovechando los nuevos medios tecnológicos de los que ahora dispone.
pero alternativamente también jamón. Y no se menciona la pimienta. Si se añadía, no era ciertamente un ingrediente característico como lo es hoy. Un poco como añadir sal: ni siquiera se menciona.
“Es difícil que nuestro poeta se lance al asalto de los espaguetis ‘alla carbonara’ o ‘alla carettiera’ si no tiene dos o tres tenedores tan buenos como el suyo. Frente al filete parecía mejor preparado para improvisar el epigrama (solía comer en la boloñesa de la Piazza del Popolo).”
Resumen de la historia de la carbonara
Y, por supuesto, ¿qué es lo que me molesta? Con tu obsesión-reina, con el plato ‘de la tradición’ por excelencia, ese que si le pones algo que no encaja, o si fallas en poner algo que sí, y si la crema no sale amarilla intensa, se desencadena la crucifixión: hoy voy a desmontar la carbonara.
El boloñés, cocinero oficial de las tropas angloamericanas estacionadas en el hotel Domus Mea de Riccione, se ve obligado a preparar una comida para Sir Harold Alexander, comandante supremo de todas las fuerzas aliadas en Italia, y para el teniente general Oliver Leese; para celebrar la liberación de Rimini y Riccione.
Piénsalo, la próxima vez que te cabrees porque le ponen bacon, cebolla o nata a la carbonara: deja las armas de los fundamentalistas, olvida lo que sabes y deja que la evolución fluya hacia el mar.
Carbonara wikipedia
Hoy el presidente ucraniano Zelensky, ayer el emperador Claudio, la condesa guerrera Caterina Sforza, el sindicalista Lech Walesa, el rey Jorge VI… Todos los líderes por casualidad (o por fuerza) que las circunstancias han empujado a cambiar el curso de la historia. Y de nuevo: en la Urbino de Federico da Montefeltro, gran protagonista del Renacimiento; hace 30 años, la muerte de Giovanni Falcone en Capaci; el escándalo del Watergate que obligó a dimitir al presidente Nixon; los misterios, nunca resueltos, que rodean el asesinato de Giovanni Borgia.
Quién inventó la carbonara
*5: Se pueden encontrar recetas que se parecen vagamente a la Carbonara en el libro de cocina napolitano “Cucina teorico-pratica”, escrito por el cocinero/literato Ippolito Cavalcanti y publicado en 1837.
*2: Hay que señalar, sin embargo, que la receta no se corresponde perfectamente con la reconocida como “canónica” en la actualidad: la principal diferencia radica en el uso del ajo y el queso gruyere.
Otra hipótesis relaciona la palabra con los posibles inventores de la receta, es decir, los leñadores que quemaban su madera para fabricar carbón, los “carbonai” (o “carboneros”).
